Este templo gótico es nuestro centro espiritual histórico. A diferencia de la Sagrada Familia, que sigue en construcción, la Catedral ha visto pasar siglos de historia barcelonesa. Los locales apreciamos especialmente su claustro, un oasis de paz en medio del bullicio turístico, con palmeras, naranjos y las 13 ocas blancas que nadan en su fuente central. Durante las fiestas de Santa Eulalia y Corpus, la Catedral se convierte en el epicentro de antiguas tradiciones como el baile del huevo o la procesión de gigantes y cabezudos. 🕌⛪🕊️🌴📜 Dato curioso: Las 13 ocas blancas del claustro representan la edad de Santa Eulalia cuando fue martirizada, y según la tradición, cada una simboliza uno de los tormentos que sufrió la patrona de Barcelona. Si vienes el domingo por la mañana, podrás ver a los barceloneses bailando sardanas frente a la fachada neogótica, aunque pocos saben que esta fachada se terminó en 1913.